Cuando hablamos de Marketing 3.0 no estamos hablamos de social media, ni de marketing online o marketing tradicional, hablamos de otra cosa, hablamos de estrategia, de la que debemos implantar en nuestro modelo de negocio para que siga creciendo y no “muera” ante la primera complicación o crisis.
Es un marketing con una base social y ética, más enfocado a satisfacer necesidades, plasmando unos valores y una responsabilidad en sus acciones, lo que nos ayuda a conectar con más fuerza, y con los consumidores más complejos.
En resumen, podemos decir que el marketing 3.0 es la evolución del marketing que surge a raíz de los cambios experimentados por la sociedad, los mercados y, lo más importante, por los consumidores.
Si algo diferencia al marketing 3.0 del tradicional, es que el 3.0 se concentra en la persona, y no en los productos, como lo hacía el 1.0, o en los consumidores, como lo hacía la versión 2.0 del marketing.
Y es que, ya de nada sirve tener la publicidad más bonita o emotiva para captar a los consumidores si los valores de la compañía no son creíbles, porque los consumidores actuales, no solo quieren consumir el producto que les ofertamos, quieren, además, que el mundo sea un lugar mejor y que nuestra empresa y/o producto contribuya a ello. Son más que consumidores, son personas.
A groso modo, podemos decir, que el marketing 3.0 consiste en crear maneras originales, ingeniosas y novedosas para llegar a los clientes, teniendo en cuenta a los empleados, los partners, los distribuidores, proveedores, etc, para crearlas, de modo que se sientan integrados y parte esencial de la mejora 3.0 de la empresa .
Philip Kotler es un estadounidense, economista y especialista en marketing, conocido y reconocido mundialmente como el padre del marketing moderno. Ha publicado más de 20 libros que han sido traducidos a más de 20 idiomas. Y entre sus referencias más difundidas están sus 10 principios a seguir:
Para entender mejor el marketing 3.0 . Aprendamos la raíz de tres fuerzas principales que impulsan estos cambios.
Con el avance de la tecnología, surgieron las redes sociales y plataformas de colaboración. Esto permitió que los individuos y grupos se conecten e interactúen entre sí. Los medios sociales permiten a los usuarios crear noticias y difundirlo. Los medios sociales resultaron ser aún más significativos cuando los consumidores empezaron a influir en otros consumidores con sus propias experincias, así como opiniones.
En un mundo de colaboración, el secreto es entender lo que realmente el consumidor espera y cuáles son sus actitudes que pueden fomentar que colabore con la marca. Para ello, algunas empresas han utilizado las denominadas comunidades en línea. Estas permiten a los consumidores y las empresas conectar y cooperar el uno con el otro, así como la adquisicion de insights.
Además de simplemente escuchar las opiniones y tomar decisiones que sean las correctas, algunas empresas también usan programas de co-creación. Donde los productos y servicios pueden ser modificados de acuerdo a los requerimientos y necesidades de los clientes.
En un mundo dominado por las grandes empresas globales, entender el perfil de los consumidores locales puede ser una estrategia clave para una empresa. A pesar de la globalización, los consumidores se están dividiendo cada vez más en grupos y nichos. La cultura local o de un grupo específico puede dictar la forma en que las empresas utilizan las herramientas de marketing. La segmentación de la audiencia e identificar patrones culturales específicos es uno de los factores determinantes de las organizaciones en el nuevo mundo de la publicidad.
Algunas empresas han buscado alos influenciadores digitales con el fin de promover el producto y asociarlo con una determinada cultura nicho. Pues estos profesionales pueden posicionar la marca dentro de ese grupo, porque tienen una cierta autoridad dentro de ello.
Las personas hoy en día están buscando cada vez más experiencias y valores positivos en todos los aspectos posibles. El estilo de vida actual, lleno de angustia y culpa, hace que la gente busque significados positivos entre las empresas y los productos que consumen. En esta perspectiva, este efecto es aún más importante que la utilidad del producto en sí. Por lo tanto , las empresas deben tratar de mejorar a sí mismos más allá de los efectos físicos normales del producto. Tiene que representar un estilo de vida, una filosofía. Así que cuando se consume el producto, las personas sienten que son parte de algo más grande.
Muchas empresas apoyan causas sociales o hacen productos que no dañen el medio ambiente. Eso demuestra que se preocupan por cuestiones que no sean simplemente financieras . Es decir, que tiene un interés real en la construcción de un mundo mejor.
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